27 jun 2011

Ángeles.

Dicen que los ángeles no existen.

Hoy en día nadie cree en los ángeles, nadie cree en esas criaturas que nos protegen de todo mal y no permiten que caigamos al vacío. Es difícil creer en cosas así en estos tiempos en los que lo sobrenatural está pasado de moda. Parece imposible que exista alguien que se preocupe por nosotros cuando nadie mira a su alrededor y el mundo se afana en vivir en el egoísmo. Creer está pasado de moda.

Entonces, ¿por qué atisbo una luz siempre que ceo que voy a caer en el abismo?, ¿por qué encuentro siempre una cuerda a la que agarrarme cuando estoy colgando del precipicio?, ¿por qué cuando creo que no me puedo hundir más aparece una mano que me rescata de las profundidades?,¿por qué cuando la pena recorre todo mi ser puedo notar un abrazo reconfortante?, ¿por qué en lo más profundo de mi ser sé que nunca estaré sola?

Quizás mi imaginación me esté gastando una broma cruel, quizás todo es fruto de mi mente, quizás se trata de una vía de escape para huir de la abrumadora y cruel realidad.

Supongo que la noche calmará mi interior y traerá quietud a mis pensamientos, pero antes, debo recoger las plumas blancas que hay sobre mi cama.